lunes, 1 de abril de 2013

Capítulo 12: La palabra "decepción" se queda corta

Hola, queridos/as lectores/as. ¿Qué tal? Esperamos que bien :) Aquí os dejamos el capítulo 12, que ya era hora de subirlo. Durante esta semana publicaremos el 13 y el 14, para que no os quedéis con ganas de más juju ^^

Disfrutadlo, y comentad para hacernos saber vuestra opinión. ¡Gracias!








Después de estar dos horas haciendo el trabajo, y una hora tirados en la cama de Liam hablando, va siendo hora de que me marche.
Me levanto de la cama y voy al escritorio, donde todavía están mis cosas; las recojo y las guardo en mi bolso.
Me dispongo a abrir la puerta de la habitación cuando Liam me agarra de la cintura con sus manos y me sienta encima de él.
   - ¿Ya te vas? - me pregunta, dándome besos por el cuello. Ha averiguado que mi punto débil es esta zona, y que cuando me besa ahí, me pierdo.
   - Sí, ya es tarde... Está anocheciendo y he venido andando.
   - ¿Quieres que te lleve en coche? - Sus preciosos ojos azules se posan en los míos.
   - No hace falta. Está cerca.
   - ¿Y si te pasa algo? Déjalo, te llevo a casa - responde, dándome ahora un beso en los labios.
Nos levanta y abre la puerta, y me sorprendo al ver a Stephen plantado delante de ésta.
   - Pensaba que no acabaríais nunca - dice, cruzando los brazos. - Es tarde, deberías irte.
   - Sí, ya me iba - respondo, fríamente.
   - Voy a acompañarla a su casa. Vuelvo en un rato - añade Liam.
   - Tú no irás a ninguna parte. Demi llegará dentro de poco - dice, con los ojos inexpresivos. Demi es la madre de Liam -, y se preocupará al ver que no estás aquí.
   - No tardaré mucho.
   - Me da igual, se preocupará.
   - No me pasará nada... Solamente voy a acompañarla a su casa - responde Liam, que empieza a enfadarse.
   - ¿Dónde vive, entonces?
   - En... en el bosque - añado yo.
   - Ah, claro. Debí suponerlo. ¿Cómo no ibas a vivir allí? - susurra Stephen, entrecerrando los ojos.
   - ¿Qué? - Liam está perplejo.
   - ¿Cuántos sois en tu familia? Porque no estarás sola, me informaron de que un aquelarre se instalaría aquí.
   - Cinco. Y saben perfectamente cómo comportarse, al contrario que tú. Así que deja a Liam que haga lo que quiera.
   - ¿Pero qué pasa? ¿Qué tiene que ver su familia ahora? - pregunta Liam.
   - Cállate. No sabes nada - tercia su tío, en un tono de voz más alto.
Se hace un silencio más incómodo que el de esta tarde, pero cargado de tensión.
Yo ahora mismo tengo miedo. No de lo que Stephen pueda hacerme, si no lo que pueda hacerle a Liam.
Me coge de la mano y me arrastra hacia el pasillo, en dirección a la puerta. Liam la abre, pero en menos de un segundo, su tío la cierra de un portazo.
   - ¡He dicho que no irás a ninguna parte! - ruge. Tiene los ojos negros de rabia.
Liam está atónito, con los ojos en blanco. Supongo que nunca ha visto a su tío de esta manera, por como lo mira.
   - Vale, tranquilo. No te pongas así.
   - Será mejor que me vaya... - digo, en un hilo de voz.
   - Sí, es lo más apropiado - responde Stephen, muy enfadado.
Abre la puerta de golpe, y miro a Liam. Pero sus ojos están fijos en el suelo, inexpresivos.
   - Hasta mañana, Liam.
Se cierra la puerta, de nuevo, con un portazo.
"Ojalá no le pase nada..." Pero de repente, oigo un golpe. Parece algo pesado, que se ha caído. ¿No será...? No, no puede haberle pegado.
Salgo del edificio y en cuanto me aseguro de que no hay nadie por la calle, hecho a correr como una exalación. Unas cuantas lágrimas surgen de mis ojos; no puedo evitar no preocuparme por Liam.  Toda la tarde ha sido tan perfecta... y se ha arruinado todo por culpa de su tío.
Llego en cinco minutos a mi casa. A lo lejos, mientras me acerco amainando el ritmo, veo a Ryan en los escalones de la entrada. Tiene los brazos cruzados sobre el pecho, con una sonrisa divertida en la cara. Pero cuando estoy en el claro de la casa, deja caer los brazos de repente y la sonrisa desaparece. Me seco las lágrimas con el dorso de la mano, pero cada vez aparecen más y más.
Ryan no me pregunta nada, sólo me abraza y me lleva escaleras arriba, a mi habitación. Me sienta en la cama, y apoyo la cabeza en su hombro.
   - Princesa, ¿qué te pasa?
Sorbo por la nariz, y me seco las lágrimas de nuevo.
   - Estoy preocupada por Liam - respondo, en un susurro.
   - Cuéntame lo que ha pasado.
Le narro todo lo que ha sucedido esta tarde, con mi hermano no tengo secretos ninguno: la verdadera identidad de su tío, la amenaza, el momento del beso, el repentino enfado de Stephen, los chillidos, y el golpe cuando me fui.
   - ¿Y por qué piensas que le ha podido dañar? - me pregunta Ryan, acariciándome y eliminando los restos de lágrimas de mi mejilla pegajosa.
   - Porque el golpe que he oído sonaba como cuando se cae una persona. He oído más chillidos, golpes... ¿Y si está herido? Ryan, te digo que estaba a punto de estallar... ¡tenía los ojos tan negros que no se le distinguían las pupilas!
    - No te preocupes, cielo. Todo estará bien mañana, no le pasará nada. Tranquilízate...
Pero no puedo. No puedo dejar de pensar en él y en lo que el loco de su tío le ha podido hacer. Yo, como siempre, imaginándome lo peor.
   - Mañana - continúa -, si le ha pasado algo, me lo dices y hablaremos toda la familia con su tío.
Noto como, poco a poco, me duermo en su hombro. Él me coge en brazos y me tumba, tapándome con las sábanas.
Lo último que recuerdo antes de cerrar los ojos, es a Ryan darme un beso en la frente.



Me despierto con la cara pegajosa, al igual que cuando me dormí, debido a las lágrimas. Me levanto de la cama y voy al vestidor.
Me pongo unos vaqueros ceñidos, un jersey de color blanco y unas botas marrones con cordones. Me dejo el pelo suelto, para que me caiga en la cara y tape mis ojos rojos.
Me guardo los libros y las libretas de las asignaturas de hoy en el bolso marrón, y bajo a desayunar. Me como tan solo un cuenco de cereales, mientras las miradas de Nicole y mamá se preguntan que me pasa. Pero no puedo responder, ya no me quedan fuerzas para eso, ni para nada.
   - Adiós - les digo, con la voz áspera.
Abro la puerta trasera y cojo las llaves de mi coche. Entro en él y arranco. No pongo música, como siempre, si no que me limito a escuchar el sonido de las ruedas al pisar las ramas y las hojas caídas de los árboles.
Creo que llego tarde, porque veo todos los coches aparcados y a ninguna persona merodeando por allí; salvo otros pocos que, como yo, llegan tarde. Entro corriendo en el centro y me dirijo a mi primera clase, Latín.
Angie está sentada con Lis, así que me voy a la última fila y apoyo mi cabeza en la mano. No atiendo mucho, sólo puedo pensar en lo que pasó ayer con Stephen, el tío de Liam. ¿Pero por qué no puedo dejarlo pasar? Seguramente esté bien... Cuando lo vea en la hora del almuerzo estará tan sonriente como siempre, con sus adorables hoyuelos.
Pero cuando entro a la cafetería, después de que acabe la tercera hora, se me cae el alma a los pies.
Él no está allí.
¿Qué le habrá hecho? Cada minuto me preocupo más por Liam.
Me siento en la mesa y entierro la cabeza entre los brazos, para alejarme de todos, del mundo. Lágrimas vuelven a aparecer por mis ojos.
Un suave zarandeo me distrae de mis pensamientos.
   - ¿Viveca? - Esa dulce voz sólo puede ser de Angie. - ¿Estás bien?
   - No - contesto, levantando la cara.
   - ¡Viveca! - exclama mi amiga, llevándose la mano a la boca. - ¿Qué te ha pasado? - Niego tan solo con la cabeza, y ella me indica con el dedo índice que vayamos al baño.
Allí dentro, todas las chicas que habían se van, al verme. ¿Tan mala pinta tendré? Aunque eso tampoco me preocupa. Angie hecha el cerrojo de la puerta y gira su cara hacia a mí.
   - ¿Qué te ha pasado? - pregunta de nuevo. - ¿Es por Liam?
   - Sí... Ayer fui a su casa y conocí a su tío, Stephen.
   - ¿Y...? - me anima a seguir Angie, moviendo las manos y con los ojos abiertos.
   - Liam y yo fuimos a su habitación a hacer el trabajo, pero acabamos liándonos. Fue muy bonito, la verdad; Liam es adorable. Pero cuando ya me iba, su tío empezó a chillar y a enfadarse con él, sólo porque me quería acompañar a mi casa. Cuando salí de allí oí golpes y más gritos. Desde entonces, no he podido preocuparme de otra cosa que no sea él, porque seguro que le pegó y... - Me callo de golpe, porque he empezado a hipar, de tanto que estoy llorando.
Angie me abraza. Somos de la misma altura, bajitas.
   - Vale, todo eso es malo; ¡menos que os acabásteis liando! Quiero TODO tipo de detalles, ¿de acuerdo? Pero más tarde, vayamos ahora a lo importante... ¿Cómo es que Stephen te odia? - pregunta, confusa.
   - No lo sé, Angie - respondo, secándome con un pañuelo las lágrimas que han cesado ya. - Sinceramente no lo sé.
   - ¿Crees que le ha podido pasar algo grave?
   - No dejo de imaginarme lo peor. Me daba mucho miedo su tío - miento. No puedo contarle la verdad sobre mí y sobre él.
Me abraza de nuevo, e intenta tranquilizarme, diciéndome que mañana todo se solucionará. Pero hasta que no veo bien con mis propios ojos a Liam, no me relajaré.



Cuando suena el timbre, recojo mis cosas rápido y salgo con Angie del centro.
   - Eh, ¿ese de ahí no es...? - dice ella, entrecerrando los ojos.
Pero a mí no me hace falta entrecerrarlos, porque sé perfectamente quién es, aunque tan solo lo haya visto una vez.
   - Sí, el tío de Liam.
Cierro las manos, en puños y respiro hondo.
   - ¿Qué pasa con él? - pregunta una voz a nuestras espaldas.
Nos giramos y vemos a Eileen, con su uniforme del equipo de baloncesto.
   - Cuéntaselo, Ang. Pero por favor - les digo -, no se lo digáis a NADIE más, ¿entendido? Esto no tiene que salir de nosotras tres. Confío en vosotras para guardar el secreto.
   - ¿A dónde vas? - dice Angie, al ver que empiezo a andar.
   - Tengo que solucionar unas cuantas cosas con él - respondo, señalando con la cabeza a Stephen.
Ando con paso ligero, esquivando con facilidad a los estudiantes que salen de golpe del instituto. Me planto delante de él, al lado de mi coche.
   - A qué has venido - digo, en tono cortante.
   - A ver cómo estabas. Aunque ya veo que mal.
   - ¿Yo? ¿No deberías preocuparte por tu sobrino? Es él quien no ha venido hoy.
   - Ya sé cómo está él.
   - ¿Y bien? - Sus ojos se tornan negros, y yo cojo una gran bocanada de aire.
   - Está recuperándose.
   - ¡Qué le hiciste! - Estoy con la cara roja de rabia. Odio a este tipo.
   - Se cayó "accidentalmente" - responde, haciendo las comillas de la palabra accidentalmente con los dedos - por las escaleras cuando iba en tu busca.
   - Tengo que ajustar cuentas contigo. ¿Quién te crees que eres para hacerle eso?
   - Su tío.
   - Mentira. ¡No tienes derecho a ponerle la mano encima! - grito.
No me he dado cuenta, pero poco a poco todos los estudiantes del centro se han ido yendo. Él y yo nos hemos quedado solos en el recinto.
En menos de que pueda pestañear, Stephen se a acercado a mí; está a menos de veinte centímetros.
   - Vuelve a hacerle algo - le amenazo, enseñándole los colmillos -, y te arranco la cabeza.

16 comentarios:

  1. Me encanto!!!
    Se que es muy pronto pero quiero el siguiente!!!
    Me muero de ganas de leerlo
    Gracias por esta maravillosa historia
    Besos

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    1. Nos encanta que te encante ^^
      Jajaja, dentro de dos o tres días, lo tendrás.
      ¡Gracias a ti por leerla!
      Besos para ti también :)

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  2. ¡OOOOOOHHHHHHHH! "Vuelve a hacerle algo, y te arranco la cabeza." Me encanta *-*
    Un capítulo genial, chicas. ODIO A STEPHEN. Es... -.-
    Espero que todo se arregle entre Liam y Viveca, y matad ya al tio, porfiiis :3

    Os adoro, ¡besos! <3

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    1. Gracias, Noelia :3
      Sí, pues odialo todavía más, jajaja. Aquí no se acaba.
      No, lo mataremos... bastante tarde, creo yo xD

      Nosotras también te adoramos <3

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  3. ¡AAAAH! YO TAMBIÉN NECESITO A LIAM <3

    Ojalá le arranque la cabeza, eso SÍ que sería digno de ver. Y COMO NO LE ACABES ARRANCANDO LA CABEZA, SE LA ARRANCO YO (no sé como, pero ya lo pensaré...)
    Y yo que había confiado en Stephen y había intentado creer que en el fondo era bueno... ¿ESE TÍO ESTÁ FUMADO O QUÉ LE PASA?

    No, en serio, estoy MUY cabreada, pero que MUCHO MUCHO; lo peor es que estoy hablando con Noelia por Tuenti, asíq ue le tocará a ella aguantarme... JAJAJAJAJA

    Por favor, subidlo pronto, y yo subiré el mío antes de acostarme.

    Un beso y un abrazo <3

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    1. Jajaja ^^

      Tranquila, te quedarás muy sorprendida cuando matemos al tío, pero será dentro de 20 capítulos o más... Seep, somos muy malas :3

      Uy, pobrecita de ella. ¡No la tortures demasiado, eh! Jaja <3

      ¿Lo has subido? Ahora nos pasamos :)

      Besos y abrazos para ti también <3

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    2. Eso espero, PERO NO PODÉIS TARDAR TANTO; Pues eso, lo dicho, como que me va a tocar a mí encargarme de él (pero que parezca un accidente... ¬¬)

      Nono, si yo no la torturo, solo acaba hasta las narices de mí ^^

      No, no lo he subido, VIVA MI SENTIDO DE RESPONSABILIDAD :3

      Otros <3

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    3. Sí, tardaremos bastante, porque si no la historia se queda sin misterio xD

      Jajaja, pobrecita D:

      ¡PUES SÚBELO YA!

      Más para ti <3

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    4. Bueno, os perdono que no lo matéis TODAVÍA, pero solo por ser vosotras, eh.
      Jajajajaja.

      Sí, pobre, mira que tener que aguantarme a mí...

      ¡NO LO PUEDO SUBIR TODAVÍA! El caso es que para "la sorpresa de cumpleaños" de Peeta va a ser una "sorpresa" para la cual tengo que buscar información en internet, y como mis MARAVILLOSOS, ESPLÉNDIDOS Y QUERIDÍSIMOS profesores se les ha dado por llenarme de deberes... Pues eso, ¡a mí no me ataquéis, A MIS PROFESORES!

      Otros más para vosotras <3

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    5. Jajajaja <3

      Pues sí xD

      ¿¡Y POR QUÉ NO!? SÚUUUUBELO YA. Jajaja, pues mandamos a Stephen a atacar a tus profesores ;)

      Otros muchos más para ti preciosa <3

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  4. Me uno a la amenaza de Viveca, ese tio es odioso, en serio!!! Seguid en cuanto podais. :)

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    1. Jaja, sí, os quedaréis todas muy sorprendidas cuando leáis su esperada y deseada muerte...
      Lo subiremos en dos o tres días :)

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  5. DIOS! Me encanta la historia, enserio es genial. Espero que subais el próximo capítulo pronto, no puedo esperar más.

    Un beso

    P.D. Este es mi blog: http://cuandosigueselcaminodelcorazon.blogspot.com.es/

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    1. Muchas gracias, L. :) Sí, lo vamos a subir hoy o mañana.

      ¡Besos para ti también!

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  6. NOMINACIÓN A MIS PREMIOS J. MASON

    http://veranonumero16.blogspot.com.es/2013/04/premios-j-mason.html#more

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